Pese a "tiempos duros", Cuba confía en avance biofarmacéutico

Pese a las advertencias de Raúl Castro de que se avecinan tiempos duros para Cuba, el gobierno confía en nuevos avances de su industria biofarmacéutica, que alcanzó en 2007 el segundo lugar en las exportaciones no tradicionales de la isla.

El Centro Nacional de Biopreparados (BIOCEN), en la localidad de Bejucal, anunció que completó la elaboración de más de 300 millones de dosis de la vacuna antihepatitis B recombinante, producto líder de la biotecnología en Cuba.

De acuerdo a un portavoz, esa institución, que cumplirá el próximo 14 de agosto su 16 aniversario, realiza el llenado, liofilización y envase de más de 20 fármacos desarrollados en diferentes centros del Polo Científico del Oeste.

Agregó que la entidad también ha obtenido y produce varios rubros, entre ellos más de 100 medios de cultivo, incluidos siete de nuevo tipos más rápidos y seguros en los diagnósticos, vacunas alergénicas y el reconstituyente Trofín de origen natural en sus diversas formas.

Según sus directivos, BIOCEN, con 800 trabajadores, ha sido el primer centro de la industria biofarmacéutica que obtuvo la norma de calidad internacional ISO9000, la cual mantiene desde hace una década, avalada por organismos nacionales e internacionales.

Esos organismos, a cuyas inspecciones está sometido, son la entidad reguladora Lloyd s Register, de Reino Unido, y el Centro Estatal de Control de Medicamentos (CECMED), máxima autoridad en esa materia a nivel nacional.

Reportes de la prensa oficial han señalado que el gobierno cubano ingresó 350 millones de dólares por la venta en el exterior de unos 180 fármacos en 2007, y el sector superó por tercer año consecutivo renglones tradicionales como el tabaco, el ron, el azúcar y la pesca.

Esa cifra colocó en 2007 a la industria biofarmacéutica, que encara el difícil reto de competir con grandes consorcios de las naciones desarrolladas, en el segundo lugar de las exportaciones, detrás del níquel, de acuerdo con un reportaje de la revista Bohemia.

Analistas consideran este reporte una de las pocas noticias de cierto aliento en momentos en que a la población la invade la preocupación después que las autoridades anunciaron que este año se harán "ajustes y restricciones inevitables" en la frágil economía.

Al lanzar ese "balde de agua fria" durante los últimos trabajos del Parlamento, el ministro de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez, atribuyó la nueva contracción al impacto de los altos precios de los alimentos y combustibles en el mercado internacional.

El puntillazo lo dió el propio Raúl Castro el 26 de julio pasado al advertir a la población que debe prepararse para tiempos duros de ajusto económico porque "hay que acostumbrarse a no sólo recibir buenas noticias".

En el acto de conmemoración del 55 aniversario del asalto al Cuartel Moncada, con el telón de fondo de una enorme foto de Fidel Castro, Raúl dijo que la crisis internacional deberá llevar a un mayor ahorro, más trabajo y mayor eficiencia en la producción de alimentos.

"Por muy grandes que sean nuestros deseos de resolver cada problema, no podemos gastar más de lo que tenemos", dijo tras reconocer que "todavía nos faltan muchas cosas, muchas que quisiéramos pudiera disfrutar nuestro pueblo".

Científicos cubanos señalan que la isla ha desarrollado una moderna industria de biotecnología, que exporta 38 medicamentos a 40 países.

La Habana impulsa producciones cooperadas, negocios de transferencia de tecnologías y empresas mixtas en el sector con países como China, India, Sudáfrica, Irán, Venezuela, Brasil y Vietnam, y ahora México ha mostrado interés en producciones conjuntas de vacunas.

En su reciente visita a Cuba, el secretario mexicano de Salud, José Angel Córdova, declaró que México se propone en los próximos años ser autosuficiente en la producción de vacunas y analizó con La Habana la posibilidad de una coproducción del antídoto pentavalente.

Tras visitar a mediados de este mes el Instituto Carlos J. Finlay, Córdova dijo que las autoridades isleñas ofrecieron producir esa vacuna en México. "Lo que faltaría es firmar los convenios".

Agrego que Cuba y México firmarían antes de que finalice el año un acuerdo de cooperación que abriría las puertas para la producción de la vacuna contra la difteria, el tétanos, la tosferina, la hepatitis B y la hemofilius influenzae.