Divide reacciones en Miami anuncio de Fidel

Pese a que varios cubanos exiliados recibieron la noticia con júbilo, otros consideran que el castrismo seguirá y que no habrá aún un cambio político real.

El exilio cubano de Miami reaccionó alegremente el martes a la noticia de la renuncia al poder de Fidel Castro, pero la mayoría vaticinó que no llegará un cambio político real a la isla hasta que caiga el régimen comunista.

La noticia se anunció en la madrugada e inicialmente hubo normalidad en la Pequeña Habana de Miami, pero poco después algunos vehículos hicieron sonar sus bocinas y comenzaron a aglomerarse periodistas y cámaras de televisión en torno a los principales sitios de encuentro del exilio cubano. Se escucharon esporádicos gritos de ``­Cuba libre!``

``Estamos esperando la muerte`` de Fidel Castro, expresó a la AP Alfredo García Menocal, dirigente del grupo de exiliados Consejo del Presidio Político Cubano.
``Puede que (tras este anuncio) hagan algunos cambios para entretener al pueblo, pero queremos eliminar la cúpula comunista para que haya un gobierno democrático y libre``, sostuvo el hombre de 79 años mientras buscaba un café para desayunar en un bar de la zona.

La policía dijo que estaba ``vigilando de cerca`` los acontecimientos en el barrio cubano de Miami. El portavoz de la Guardia Costera Chris O`Neil dijo que no hay indicios de que sea necesaria un mayor patrullaje de la costa en la Florida o que haya en ciernes un éxodo masivo de cubanos.

La principal organización de exiliados cubanos en Estados Unidos, la Fundación Nacional Cubano Americana, emitió un comunicado aplaudiendo que ``se cierra un capítulo oscuro de la historia cubana. El régimen de terror que (Castro) ha instaurado por medio siglo ha llegado a su fin aunque el sistema que él creó hace tantos años para mantener el control total de la población, perdura. Hay aquí una oportunidad histórica para que la dirigencia cubana, entre ellos el aparente sucesor Raúl Castro, tome medias importantes hacia el cambio democrático y hacia la restauración del derecho inalienable del pueblo cubano a la autodeterminación``.

En San Juan, Puerto Rico, los exiliados cubanos se mostraron divididos en torno a la noticia.

``Es una noticia bien grande para el pueblo cubano porque va a traer más apertura y se cae el régimen``, expresó el cubano Herlán González, dueño de un negocio de gomas de autos de San Juan.

Pero, para la escritora cubana Mayra Montero, el anuncio ``no es tan trememundo``.

``No creo que nada cambie demasiado, lo que iba a cambiar, ya está cambiando... Fidel tiene un peso tan grande en el país, que no habrá un retiro posible hasta que muera``, manifestó la laureada novelista de 55 años.

A pesar de la euforia el martes en Miami, Ibrahin Reyes, de 68 años, dijo que no había razón para festejar.

``¨Celebrar qué? ¨La esclavitud de Cuba?``, dijo el comerciante de origen cubano que hace 41 años abandonó la isla. ``Tienen una dictadura, ¨a quién le van a entregar el poder, a Raúl Castro?``, dijo para justificar su pesimismo. ``No veo ningún tipo de cambio``, manifestó.

Para el bombero José Lazcano, en cambio, se trata del ``principio del fin`` de Castro, aunque tampoco vaticina cambios importantes en lo inmediato.

``No creo que nada vaya a cambiar hasta que los dos se vayan``, expresó en inglés refiriéndose a Fidel y Raúl Castro, mientras tomaba un café de parado en un bar del principal vecindario cubano de Miami antes del amanecer. ``Para que haya cambios tendría que haber una revolución popular``, declaró Lazcano, que llegó a Miami a los 4 años y se enteró de la noticia cuando escuchaba una emisora de radio en su automóvil.

Su compatriota Juan Acosta, de 58 años, coincidió: ``Esto no es un cambio. Es sólo cosmético. Hay que esperar cinco o seis años para que haya alguna transición final al capitalismo``, expresó mientras buscaba el diario en la caseta de periódicos.

Acosta, un médico que salió de Cuba en 1990 y antes de llegar a Miami pasó cuatro años en España, consideró que la ``transición será poquito a poco``.

Conversando con otros exiliados cubanos en la puerta del café y restaurante Versailles, uno de los típicos lugares de encuentro de la comunidad cubana en Miami, María Pérez expresó que estaba ``contentísima``, aunque aclaró que será ``muy difícil`` que en lo inmediato existan cambios ``porque (los Castro) están muy amarrados al poder``.

Entre los que recibieron con alegría la noticia estaba Omar Fernández, que llegó hace seis años en bote a Miami.

``Estábamos esperando esta noticia hace tiempo``, dijo el joven de 35 años oriundo de Cienfuegos, pero de inmediato aclaró: ``no sabemos lo que va a pasar``.

``Ojalá que haya cambios ... pero va a tomar tiempo``.

Con un tono bastante más negativo, Miguel Saavedra, presidente del grupo de exiliados Vigilia Mambisa, dijo que ``no hay cambios``

``Esto es un show``, consideró. ``Los comunistas no se rinden. Hay que sacarlos a la fuerza``.

Del otro lado de la tradicional Calle Ocho, sentado en una banqueta en una esquina estratégica, el jubilado Orlando González, de 80 años, esperaba que alguien le comprara alguna de las 3.000 banderas cubanas que había llevado para vender. En las primeras horas de la mañana, ni un sólo cliente había aparecido.

``Tenía las banderas listas hace años``, expresó González, con su rostro feliz de sólo pensar que ``Raúl va a estar en el poder poco tiempo ... El deseo de todo el mundo es que se acabe la dictadura``.

Aproximadamente 1,5 millones de personas de ascendencia cubana viven en Estados Unidos, la gran mayoría en la Florida y la gran mayoría de éstos en el condado Miami-Dade, según la Oficina del Censo.

A raíz del influjo de cubanos, la zona de Miami, otrora poblada de sureños norteamericanos, es hoy en día una urbe hispanoparlante con densa influencia latinoamericana. Cubanos o descendientes de cubanos ocupan importantes cargos políticos y empresariales, como el alcalde de Miami Manny Diaz o el senador Mel Martinez.

La mayoría de los exiliados cubanos califican a Castro de un dictador despiadado que los obligó a ellos y a sus familias a abandonar su patria . Sin embargo, las opiniones sobre el futuro de las relaciones entre Estados Unidos han oscilado con los tiempos.

0 comentarios: