Fidel Castro califica de "magnífico" su encuentro con los congresistas estadounidenses

El ex presidente cubano Fidel Castro calificó de "magnífico" el encuentro mantenido ayer con varios congresistas estadounidenses, para los que sólo tuvo buenas palabras en su último artículo publicado por los medios locales y titulado 'Encuentro con Barbara Lee y otros miembros del Caucus Negro'.

"La reunión conmigo duró 1 hora y 45 minutos, según el reloj; en realidad, medio minuto, si me atengo a la velocidad con que transcurrió y el deseo de escucharlos", afirmó Fidel Castro, quien también transmitió "la magnífica impresión" dejada por la delegación norteamericana en su hermano y sucesor, Raúl Castro.

El antiguo dirigente de 82 años se disculpó por no poder encontrarse con los siete congresistas por falta de espacio. Tras detallar quiénes acudieron y destacar especialmente la presencia de Barbara Lee, Castro relató que durante la reunión contó "las experiencias vividas en dos años y siete meses de internamiento hospitalario" y las actividades a las que se dedica actualmente.

"Recordé que los había invitado para escucharlos y comenzaba a olvidar lo que más me interesaba: conocer sus opiniones. Fue reconfortante el interés y la profundidad con que exponían sus puntos de vista, la sinceridad y calidad de sus palabras, sencillas y profundas", añadió el ex presidente.

FUTURO

Castro les preguntó acerca de una afirmación realizada por uno de los legisladores estadounidenses que aseguró que el presidente Barack Obama "puede mejorar las relaciones con Cuba, pero Cuba debe ayudar a Obama". En este sentido, recordó que La Habana no ha amenazado a Estados Unidos ni dispone "de alternativa alguna" que le permita tomar la iniciativa.

"Partíamos de la seguridad de que sus palabras (de Obama) eran sinceras y lo habíamos afirmado públicamente antes y después de su elección". Sin embargo, "expresábamos a la vez el criterio de que las realidades objetivas eran, en Estados Unidos, más poderosas que las sinceras intenciones de Obama".

Previamente, la congresista Laura Richardson relató a su llegada a Washington una pregunta realizada por Castro nada más verlos y que aparentemente abre la puerta a un acercamiento entre La Habana y Washington. "Mientras se aproximaba, nos miró directamente a los ojos, bastante al corriente de lo que estaba ocurriendo, y nos dijo: '¿Cómo podemos ayudar al presidente Obama?'", recordó.