Inmensa posibilidad de intercambio para artistas cubanos en la Feria de París

Un balance ampliamente satisfactorio en cuanto a la presentación, difusión y distribución de su artesanía popular, su música y sus bailes, registró la representación cultural cubana, que cumplió nueve años seguidos de presencia en la Feria internacional de París, que culmina este domingo.

Para Ángel Arcos Gómez, reponsable del stand cubano en esta muestra anual iniciada en 1904, y a la que Cuba viene desde 2004, lo positivo de este balance se mide en las posibilidades de difundir las expresiones culturales y populares de su país y por la adquisición de nuevos conocimientos y técnicas para los artesanos.

"A partir de esta feria que es uno de los mercados históricos más conocidos para el producto cultural cubano, hemos podido ir a la Feria de Lyon (este), la de Marsella (sur) en 2006 y a la de Bensançon (centro este) que en 2006 y 2008 estuvo dedicada a Cuba", destacó el responsable.

Arcos señaló también que a partir de la Feria de París se habían logrado contactos con empresarios franceses interesados en la instalación de tiendas especializadas en productos cubanos. "Hay interés por instalar este tipo de tiendas en París, Vannes (Bretaña, oeste) y Colmar (este), precisó Ángel Arcos.

Estos años de experiencia también han permitido ir conociendo mejor las características de los franceses que llegan a esta muestra y en función de ésto ir adecuando los diversos productos artesanales y culturales.

Tema especial y también como productos culturales es el de la música y el baile cubanos y sobre todo éste último, que ha ido desarrollando un interés nuevo creciente en Europa. "Ahora tenemos profesores de los diferentes bailes cubanos que vienen a enseñar en España, Francia e Inglaterra" señaló el responsable.

Por su lado, María Jorge, que en Cuba es responsable de una galería artesanal en La Habana Vieja se refirió a lo esencial que es para los artistas el contacto con otras formas que significa la presencia en este tipo de muestras. "Para los artistas, venidos de las distintas regiones de Cuba es esencial este contacto y sobre todo el intercambio con otras formas para ir enriqueciendo sus expresiones", comentó.

Ejemplo de este hecho fue el conocimiento que tuvieron los artistas que vinieron en los primeros años de presentación en la Feria de París, de materiales nuevos expuestos en ésta y que se llevaron luego a Cuba.

Resultado de ésto, el gobierno cubano firmó un contrato de la empresa francesa Pebeo, especializada en la fabricación de todo tipo de materiales artísticos, que significó la introducción y el desarrollo de nuevas técnicas y expresiones, según informó Ángel Arcos.